¿Te pasa que abres tu despensa y no sabes ni por dónde empezar a buscar lo que necesitas? Una despensa bien organizada no solo facilita el día a día en la cocina, sino que también ayuda a conservar mejor los alimentos, reducir el desperdicio y optimizar tus compras.
En esta guía, te mostramos paso a paso cómo organizar tu despensa de manera eficiente, incluso si tienes poco espacio.
Una despensa desordenada puede convertirse en el peor enemigo de tu cocina. Los alimentos vencidos, los productos duplicados o las cosas que nunca encuentras terminan generando pérdidas y frustración.
Invertir tiempo en organizar tu despensa es una acción práctica que se traduce en ahorro, comodidad y salud.
Antes de organizar, es necesario partir desde cero. Retira todos los productos de la despensa y revisa fechas de vencimiento. Bota lo que esté vencido y dona lo que no uses pero aún esté en buen estado. Limpia con un paño húmedo y desinfectante las superficies internas.
Agrupa los productos por categorías. Por ejemplo:
Esta clasificación facilitará el acceso y evitará la compra innecesaria de productos repetidos.
Guardar los alimentos en envases herméticos y transparentes permite ver su contenido fácilmente, conservarlos por más tiempo y evitar plagas. Añade etiquetas con el nombre del producto y su fecha de vencimiento.
Tip extra: Apila los envases más pequeños sobre los más grandes para optimizar el espacio.
Coloca los productos que usas a diario al frente y a la altura de los ojos. Los alimentos menos utilizados pueden ir en los estantes superiores o inferiores.
No olvides organizar también con la técnica FIFO (First in, first out), así podrás aprovechar los productos que estén próximos a vencer y evitar el desperdicio de alimentos.
Si tu despensa es pequeña, utiliza organizadores, canastas, estantes adicionales o bandejas giratorias. Estas ideas para organizar despensa te permitirán ganar espacio y mantener todo a la vista.
Mantener una lista de productos básicos de una despensa es clave para que nunca falten los ingredientes esenciales. Algunos indispensables son:
Adapta esta lista a tus hábitos de consumo y al tamaño de tu familia.
Una vez al mes, revisa tu despensa, limpia los estantes y haz un inventario rápido. Esto te ayudará a controlar el stock y evitar que los alimentos se echen a perder.
¡No hay problema! Si te preguntas cómo ordenar una despensa pequeña, el secreto está en maximizar cada rincón. Usa frascos apilables, puertas con estantes, ganchos y cajas organizadoras. También puedes rotar los productos por fecha de vencimiento: los más antiguos al frente, los nuevos al fondo.
Te invitamos a ordenar tu despensa según la temporada de invierno o verano para conservarlos mejor según la temperatura ambiente de tu hogar:
Saber cómo organizar tu despensa no tiene que ser una tarea complicada. Con un poco de planificación y constancia, puedes transformar tu alacena en un espacio limpio, funcional y agradable. Además, al tener una despensa de alimentos bien ordenada, reduces el desperdicio, cocinas con mayor facilidad y haces compras más inteligentes.
Recuerda: una despensa organizada es el corazón de una cocina eficiente. ¿Ya comenzaste a ordenar la tuya? Conoce más consejos en nuestro blog.